miércoles, 16 de abril de 2008

Enfermedad...

...cómo escribir cuando ni siquiera se disfruta comer, dormir o cagar...¡maldita enfermedad!

jueves, 10 de abril de 2008

Recuento de un evento que no ví

9 a.m., San Francisco, 9 de Abril de 2008. Estoy tarde. Beso a mi mujer, me despido de Sasha, mi huésped, y quedamos en hablar a la una de la tarde para definir donde nos reuniremos. Según las noticias de la mañana el mejor lugar para ver pasar la antorcha, ergo lugar donde acudirán más grupos a favor y en contra de China, será la estación del Ferry en Embarcadero.

Bajo apurado las escaleras. Espero que el candado sea benevolente conmigo y me deje sacar la bicicleta. Por suerte lo es y emprendo el camino a la estación del tren. Pedaleo con más fuerza que la usual.

11 y algo más de la mañana, salgo de la reunión de staff. No he tenido nada de tiempo para revisar los últimos acontecimientos. Tengo mucho que hacer pero prefiero hacer lo que me gusta. Abro la página Web de "La Crónica de San Francisco"...miles de personas se han concentrado en McCovey Cove, punto de partida de la tea, y a lo largo de Embarcadero para apoyar y protestar el paso de la antorcha rumbo a los juegos olímpicos de Beijing. Avionetas flameando mensajes a favor y en contra de China sobrevuelan la zona donde grupos que llevan consigo las rojas banderas de este país sobrepasan en gran número a los que portan la insignia del Tibet y apoyan su liberación. Siguiendo la ruta, cerca del Estadio AT&T, grupos a favor y en contra intercambian gritos mientras una línea de uniformados policiales los separan. El ambiente se pone tenso mientras el día avanza y la hora se acerca...solo unos cuantos centímetros separan a los grupos que han formado cadenas humanas y continúan gritando, aún con más frenesí, lo que preocupa a muchos...

La violencia no me preocupa, el no hacer nada sí...

Medio día. Termino el cronograma de la mudanza de la oficina, tarea de la que tan "alegremente" me hice responsable en la reunión de staff. Todos en ese cuarto sabíamos que al final el que terminaría haciendo el trabajo sucio sería yo, así que para que prolongar la agonía...prefiero morir como héroe.

Las sirenas y las hélices de los helicópteros parecen ser más numerosas que lo usual. Tal vez si, tal vez no. Tal vez quiero que sean más...

1 p.m., Sasha al teléfono. Está por el barrio y quedamos en vernos en Market y Segunda. Cuelgo. Timing perfecto: mi mujer al teléfono. Nos veremos en el último vagón del tren en la estación de Montgomery, luego de que me encuentre con mi huésped.

Embarcadero. En medio de miles de personas, todas ellas diferentes así como diferentes son los carteles que atraen mi atención..."Libertad para el Tibet"..."Paz en Darfur"..."Primero lo primero, traigan las tropas de Iraq"..."El principal violador de Derechos Humanos son los Estados Unidos de América"...

...miles de personas, muchas más llevando la bandera de la Republica Popular de China, todas apoyando el paso de la antorcha...

Dos y media de la tarde. Sasha ya se fue; tenía una entrevista de trabajo. Mi mujer acaba de saborear la última cucharada de su yogurt, mientras yo, parado sobre las puntas de mis pies, trato de divisar entre millones de cabellos que danzan al compás del viento del mar si es que la tea viene o no viene. Tenemos que volver al trabajo, necesitamos los verdes...

3:15 p.m. "Alcalde Mayor Gavin Newsom y otros oficiales dijeron que luego de evaluar la situación; aireadas banderas flameando a un lado y otro de la anunciada ruta al son de sus portadores, no tuvieron más alternativa que cambiar el recorrido..."

7:15 p.m. Me pongo el gorro, encima el casco. Pedaleo otra vez, finalmente con dirección a casa, luego de una bien ejercitada hora de nado. El olor a cloro es aún fuerte y me provoca...¿Qué pasará mañana? ¿Despertará el Tibet libre? ¿Habrá paz en Darfur? ¿Será que algún tibetano huele a cloro en este momento? ¿Será que un chino tiene que volver a casa para preparar la cena mientras su mujer sigue en el trabajo?...

11:20 p.m. Mi mujer yace en el lecho, aparentando dormir. Sabemos que mientras no me acueste ella no dormirá. Hipnotizado, Sasha se pierde en la pantalla de su laptop; también yace en su lecho, un colchón inflable en el medio del living. Y yo, con sueño como ellos, tratando de recordar y recontar un acontecimiento que no vi y la cotidiana vida que viví...

martes, 8 de abril de 2008

El Verdadero Fuego: La travesia de la Antorcha Olimpica

"Prometeo trae el Fuego a la Humanidad", de Heinrich Füger, (1817).

Fuego. Elemento vital de poder y evolución, no pudo tener sus orígenes sino en las entrañas de un mundo de dioses. Gracias a Prometeo, un Titán amigo de los hombres, que robo dicha flama de Zeus, dios de los dioses, aun a sabiendas de su castigo, es que ahora gozamos de esta llama a la cual superación, justicia y libertad identifican.

Aun así, durante los últimos días, y sin desmerecer el sacrificio del Titán, varios miles de sus mortales amigos han expuesto su propia seguridad, unos mas que otros, por apagar la lengua que flamea ardiente desde que fue encendida en Olimpia con destino a Beijing.

La semana pasada miles se amontonaron y muchos mas se enfrentaron al orden mientras la tea recorría las calles de Londres. Incontenible aun mas, dos días atrás, cuando paso por Paris y los soplos de Justicia la hicieron encerrarse en una caja metálica para finalizar su recorrido. Libertad para el Tibet! Paz en Darfur! parecían los vientos gritar, mas en la caja es difícil escuchar.

Más, los humanos no se cansan, y saben que dentro de ellos también existe una pequeña flama de esperanza. Entienden que el tiempo es ahora y que tal vez mañana la mente humana ya no se acordara de nada. Por eso gritan, por eso suben, por eso bajan.

Mañana la flama llega a la ciudad franciscana y mortales estan listos para soplar. Para soplar no un frió viento sino el halito verdadero que devuelva a la humanidad el fuego de la justicia y libertad, y de a Prometeo la digna gratitud que le debemos.

Activistas, suspendidos del puente Golden Gate en San Francisco (USA), expresan su pedido de "Libertad para el Tibet".

viernes, 4 de abril de 2008

Amor y Odio

El amor y el odio son dos cockteles, uno dulce y otro amargo.

La sensacion que produce cada uno es en verdad emocionante, lo que hace mas dificil dejarlos.

Sin embargo, no pueden ser bebidos al mismo tiempo porque de hacerlo no solamente quitan el sabor a nuestra vida sino la confunden mientra la embriagan el doble.

Debemos, por tanto, no solamente saber de cual tomamos sino hasta cuando y cuanto lo hacemos porque, no debemos olvidarnos, la borrachera no dura tanto como el "ch'aki"...